“!Quiero ser papá!”
Primero me gustaría comenzar estas anotaciones, con una pregunta que creo que todos/as nos hicimos en algún momento; ¿Quiero ser papá?, ¿Cómo puedo llegar a serlo?, ¿Qué implica ser papá o mamá?, ¿Qué implica serlo en estos tiempos actuales?, ¿cambia en algo ser gay, lesbiana o travesti?
Esta pregunta es troncal en el momento en que se nos presenta la idea o fantasía de ser padres, entender que implica esta situación, para comprender nuevamente que uno no nace padre, ni que por más deseo de serlo, no implica que todo será “color de rosas” . Al contrario, la crianza de un hijo/a implica mucho de nuestro tiempo y mucha de nuestras ganas e interés, ya que no es un “tamagochi” o una planta que solo necesita regarse a diario. El ser humano se construye a partir de los vínculos que establece con otros pares y uno de los primeros es con los padres y madres, sean estos biológicos, “del corazón” o adoptivos. Vinculo donde prima el amor, el cuidado, el respeto y los valores propios de todo ser humano. Uno de ellos, y que principalmente nos interesa, el respeto a la diversidad que será base de todas las enseñanzas y que allanaran, en parte, el camino a la hora de plantear la realidad de las familias homoparentales, de nuestras propias realidades. Es por eso que hoy planifico, no transformar este espacio en un lugar “panfletario” sino un espacio de lucha, de debate, de conocimiento y reconocimiento, en donde padres y madres como nosotr@s, podamos volcar nuestras expectativas y deseos, miedos y realidades cotidianas; Lo que queremos, lo que deseamos. Ser padres, madres, siendo como somos, ya que no hay distinción alguna, pero si una realidad que nos pone en un complejo entramado; el tener una sexualidad no hetero-normativa, lo cual muchas veces nos plantea desafíos en una sociedad que se basa en esta norma y cercena la posibilidad de crianzas alternativas por fuera de la familia tradicional. Lo que si debemos saber, es que el rol de padre no lo tenemos innato sino que lo vamos construyendo con otro/as, a través del tiempo y en diferentes espacios donde los reconocimientos, logros y dificultades son un contínuum entre el ser y el crear cotidiano. Construccion constantemente en lucha y atravesada por miles de imagenes y representaciones que se juegan en nuestro imaginario tanto colectivo como individual.
Por lo antes dicho, es que este espacio que hoy inicio, no espera ser un decálogo del “buen padre gay”, sino que busca visibilizar una realidad, lo que hoy vivimos cada uno y cada una de nosotr@s. Lo que si deseo es que mi pequeña experiencia (ya que mi hijo tiene apenas un año) como la de tantos otros padres y madres, los ayude a poder pensar las experiencias que cotidianamente nos sucede, conocer herramientas básicas (teóricas y prácticas) para entender nuestras realidades, diferentes pensamientos para comprender y acercarnos a la complejidad que nuestras paternidades y maternidades han significado para las antiguas instituciones familiares que nos han inculcado. Pero no desde una visión puramente cientificista, sino vivencial, desde el sentido común que muchas veces no se reconoce como saber “científico”, pero que aquí ponderaremos como uno de los saberes plenos de valor.
Si vuelvo a las preguntas iniciales, pregunta que me hago y me hare siempre, con cada momento al lado de mi hijo, cada vez que lo veo a los ojos, a quien desde ahora llamare D., es que pienso cuan necesario puede ser un espacio como este para los nuevos padres que hoy que nos estamos construyendo lentamente y los que ya han transitado y lo transitan. Pienso en que no quiero ser un papá "bueno" o "malo" ….yo solo quiero ser papá, solo un simple papá para D.
Sé que muchos acompañaran mi idea. Y ojala que les sirva y me sirva. Gracias y empecemos …a caminar juntos.